Canta un alma en mi oscuridad;
tal vez la mía.
La anidaré en mi útero
como el deseo blando que hubo hace siglos
ayer.
No hay horas que parir
ni adioses
ni dioses.
13.10.13
desnuda
Me despojo de la máscara brillante,
las capas de telas, abrigos
y pelos.
El roce del aire enciende la piel
y rechazo el vínculo:
deseo de mí.
Ni boca ni sexo ni ojos mirándome.
Sola ante el espejo.
Y de él
también
me dejo ir.
las capas de telas, abrigos
y pelos.
El roce del aire enciende la piel
y rechazo el vínculo:
deseo de mí.
Ni boca ni sexo ni ojos mirándome.
Sola ante el espejo.
Y de él
también
me dejo ir.
7.10.13
6.10.13
vapor
lengua la tarde sobre la cordillera
muralla mi alma.
diapasón helado
observa
mi palma gris.
era el tiempo acurrucado
un señuelo vano.
vapor el deseo
la prisa la corriente la vida
todo
menos el camino
muralla mi alma.
diapasón helado
observa
mi palma gris.
era el tiempo acurrucado
un señuelo vano.
vapor el deseo
la prisa la corriente la vida
todo
menos el camino
3.10.13
20.9.13
realidad
Alguien
dijo que el futuro está en el agua.
Hija,
yo te enseñaré a nadar.
Lloraron
cuando las reses morían
sin
caminar
y
las comieron igual.
Yo
te daré árboles que cosechar.
El
cielo se tornó espeso, irrespirable.
Cerré
los ojos,
abracé
tus lágrimas
y
maldije la imponente realidad.
Prohibir
espacios,
cortar
palabras o cobrar;
todo
es un tablado viciado.
Mundo
que se yergue sobre el mundo natural
forrado
de latex, concreto y carteles de propiedad.
Todo
es uno.
El
cuerpo quiere aire, espacio y libertad.
El
mío quiere abrirse al aire, al sol y la dulzura
de
dejarse amar como animal.
universal
Hablar
de amor es decir tierra
oscura,
fértil, capricho de lombriz y mar.
Es
poblar un espacio pequeñito
de
trinos rescatados y huellas que se van.
Yo
te cubro de besos
y
traigo semillas para dar.
Yo
recibo tus manos que trabajan.
Soy
un cuerpo devuelto en celo universal.
testamento
Yo
te lego, hija,
esta
caja de cemento con antenas
y
botones que te harán comunidad.
Zapatos
para andar por el asfalto
quemante
de la ciudad
y
cables en el cielo que conserven
la
casa en su lugar.
Te
lego, princesa, dos duros cauchos
que
te lleven urgente a almorzar
cuadrados
crocantes de una pasta
con
copyrigth.
(Y
una bolsa pequeña que atesore
el
último damasco nacido en libertad).
Señuelo
Recorro infinitos
como libros.
Me aprisiono
líquida
colmada de perfumes
inicuos.
Todo existe dentro
como cálices de
jacarandá.
Y llega la pira de
la memoria:
señuelo fatal donde
van a morir las ballenas.
Ausente
La madrugada demora tu viña blanca.
El tiempo se yergue polar
sobre las curvas pétreas de los destinos.
Allí donde nos perdimos
yo te devoro, yo me devoro en tus venas
abismales.
Una ciudad se construye esta madrugada
alrededor de mi ausencia.
Donde no estoy
allí
alguien me espera.
Quimera
Sólo quiero pensarte.
Ni orquídeas ni bombones ni brillantes.
Un gorjeo desnudo en una roca nueva.
Ni libros ni matices.
Ojos como cálices mecidos en el ámbar de este anhelo.
Ni suspiros ni ausencias.
La siesta se reclina en un dibujo
que nunca vi.
Sólo espira el instante inmaculado
que arrullamos con dedos distantes
en la bruma tibia de esa íntima quimera.
pleonasmo
Bajo el reloj permanezco
tácita y vehemente.
No hay ciencia que discurra los minutos
más urgente que el péndulo rugoso del deseo.
Una huella hilvanada hacia el futuro
germina pleonasmos.
él me espera…
él me espera…
él me espera.
6.9.13
30.8.13
Suscribirse a:
Entradas (Atom)